La diseñadora ha presentado su colección Primavera-Verano 2014, "La Habana 1948", entre más de 400 invitados (entre personalidades, medios y seguidores de la firma), que le han dado una muy buena acogida.
La Habana 1948 es una oda a la época dorada de una ciudad que brillaba de luminosidad por el día y vibraba por las noches.
La colección traslada a la perla de las Antillas, una ciudad cosmopolita y hedonista en la que caminar por sus calles es una aventura desde primera hora del día. El blanco radiante de las guayaberas inunda las aceras dándole un aspecto fresco que deslumbra al observador. Y en este escenario, se sienten los rayos del sol incidiendo a través del traje de lino, también blanco.
El blanco es el hilo conductor de una colección en la que la diseñadora retoma la guayabera cubana como punto de partida para rendir homenaje a la vestimenta tradicional, reinterpretada. La bata cubana con sus volantes y sus hombros descubiertos también se refleja en algunos de los diseños de esta “Habana de día”.
El sombrero de guano es el complemento clave en esta primera parte de la colección.
Y como contrapunto a la inspiración tradicional, está la geometría de los suelos hidráulicos que llenan la ciudad y que se plasman en algunas prendas. Dibujos geométricos hechos de manera artesanal, como un patchwork en los tonos de las viejas fachadas.
La Habana, blanca y radiante de día, se transforma al llegar la noche en una Habana de brillos casi mágicos. El jazz, las bailarinas con sus espectaculares trajes y tocados de plumas, el ambiente vibrante y la elegancia de las espectadoras aporta la nota sofisticada a la colección.
Un mix de tejidos con aplicaciones de pedrería, acabados dorados, brocados y estampados refleja el ambiente bullicioso del cabaret y convierte la colección en una fiesta.
¡¡¡Enhorabuena, Cristina!!!
Y si aún no habéis visto su colección O/I 2013-14, Dickens, os invitamos a visitar nuestra página de Facebook. ¡Os va a encantar!
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